Canvas Consultores
19 marzo 2020
2 min. lectura
En las últimas semanas la vida nos ha cambiado completamente. ¿El motivo…? Una pandemia global llamada COVID-19. Aunque parezca el argumento de un capítulo de Black Mirror o de Years & Years, es ahora nuestra nueva realidad. ¿Cómo seremos capaces de afrontar esta situación distópica e incierta a partes iguales?
«Acostumbrados a habitar un entorno de certeza y seguridad donde todo está previsto, controlado y asegurado –o eso se cree–, de repente la incertidumbre ha irrumpido sin pedir permiso», escribe Cristina Monge en este interesante artículo.
Y así ha sido. Una realidad incierta que cambia a cada minuto se ha instaurado en nuestra sociedad, impactando en todos los ámbitos: desde la forma en la que trabajamos, la economía global y cómo están operando las empresas, hasta en nuestra capacidad para circular y movernos libremente.
Esto nos lleva a reflexionar: ¿cómo algo tan microscópico como un virus es capaz de irrumpir, desestabilizar y cambiar por completo nuestro día a día? Situaciones como esta, demuestran que estamos demasiado acostumbrados a la satisfacción inmediata de nuestras necesidades y cuando eso se ve amenazado no tenemos muy claro cómo reaccionar.
No cabe duda de que tras estas semanas de confinamiento volveremos a una relativa normalidad, pero… ¿habremos aprendido algo? ¿Seremos capaces de reflexionar y reordenar nuestras prioridades como individuos y como sociedad? ¿Nos empezaremos a aceptar como seres vulnerables? ¿Nos llevará a ser una sociedad menos individualista?
En la respuesta a estas preguntas se encuentra que podamos asimilar y gestionar un contexto de incertidumbre en el que cualquier futuro distópico parece posible.
Continúa leyendo sobre el tema en esta lectura recomendada.
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